El río legó a su pico histórico de crecida y provocó la evacuación de miles de habitantes, puentes partidos, la ruta 54 completamente dañada y un pueblo totalmente incomunicado.
Unas 2237 personas afectadas por la crecida del río Pilcomayo se encuentran alojadas en centros de emergencia y el resto fue trasladada a casas de familiares en las ciudades de Tartagal y Aguaray, Salta. }
En tanto, como hay dos cortes sobre la ruta 54, por lo que las tareas de evacuación y asistencia continúan este domingo por vía aérea.
El secretario de Defensa Civil, Néstor Ruiz de los Llanos, informó que el Comité de Emergencia continúa trabajando en socorrer a las familias afectadas. Hasta el momento, son alrededor de 7000 las personas que se desplazaron de sus parajes.
Ruiz de los Llanos señaló que el nivel del río Pilcomayo subió durante la noche llegando a 7,26 mts.
Pese la crisis actual, el funcionario rescató que «las obras de canalización, de defensa y los anillos de defensa construídos, realmente sirvieron y tuvieron su efecto de contención» pero «la cantidad de agua que hoy vemos realmente no tiene precedentes en la zona».
Por su parte, el gobernador Juan Manuel Urtubey y la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, recorrieron el sábado los puntos más afectados. Urtubey confirmó que continuarán las operaciones de puente aéreo con las localidades aisladas, asegurando la provisión de alimentos, medicamentos y bebidas.
Los desbordes ya afectaron a las comunidades indígenas de La Curvita, El Cruce de Santa Naría, Padre Coll,
«Ayer había una situación dividida del comportamiento del río, en algunos lugares parecía que bajaba y en otros que subía, pero el río estaba en creciente, y la ruta que une a Santa Victoria con Aguaray y Trartagal, si bien está pavimentada y en buen estado, hay muchos sectores con gran cantidad de agua que cruzan el camino», explicó Rolando Álvarez, de Defensa Civil de Tartagal. Para describir la situación apremiante de la población, Álvarez se refirió a los habitantes de Santa Victoria Este es «de los más pobres entre los pobres». «En este caso la mayoría de las familias son precarias. Es una población mayoritariamente aborigen y de criollos», explicó. Álvarez reforzó el pedido de las autoridades para recolectar colchones, frazadas, víveres secos, agua mineral, elementos de aseo personal, de limpieza en general, lavandina, detergentes y desinfectantes. Las donaciones pueden llevarse, por ejemplo, a la carpa que Gendarmería instaló en la avenida Figueroa Alcorta y Pampa, en Belgrano. M1.-